Martín Sagrera, protesta en la calle por la visita del Papa Benedicto XVI y recibe un navajazo en la céntrica calle de Preciados de Madrid por parte de un sujeto que luego fue detenido por un policía “de paisano” La situación económica de la población española ante esta crisis manufacturada y planificada es extremadamente delicada, mientras los poderes siguen riéndose de la población celebrando todo tipo de eventos de altas alcurnias gastando el dinero de la población impunemente. El Papa, máximo representante de una organización criminal, asesina, inquisidora, ladrona, depravada, usurera, pederasta y homófoba, haciendo caso omiso de la pobreza española está disfrutando de una gira por España en colaboración con los farsantes y parásitos políticos, la población se manifiesta en contra de este despilfarro y la respuesta de la política española es muy simple: enviar fuerzas de seguridad a reprimir a la población por la fuerza.
Esto es la democracia y la Iglesia en todo su esplendor:
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